Pero no todo ha sido tristeza a lo largo de estos 68 años de historia, el Íbis también ha tenido sus momentos de gloria. En el año 1999 pudo salir de la segunda división estatal - no gano el campeonato, fue subcampeón- para descender con honores nuevamente en el año 2000. Pero según uno de sus dirigentes, el señor Urbano Brandão, entre los momentos incomparables del peor equipo del mundo están sus vibrantes victorias contra el Náutico el Santa Cruz y el Sport, "todas los juegos fueron emocionantes y terminaron por casualidad con idéntico
marcador: 1x0".
Y aunque estas victorias siguen en la retina de los hinchas desde los lejanos años sesenta también recuerdan con dolor como a pesar de ganar el partido perdieron los dos puntos frente al aguerrido y archiconocido(!?) Timbu en aquel memorable partido de 1961: "...descubrieron un jugador que habia sido inscrito de manera irregular... y todo aquel esfuerzo se fue aguas abajo ..."
Los hinchas del Íbis se declaran orgullosos de pertenecer al peor equipo del mundo y mucho más en el país 5 veces campeón mundial, uno de ellos afirma que "el Íbis es como la pasión del borracho por la bebida... sabe que hace mal pero no la deja".
Ultimamente están preocupados porque parece que algunos equipos se esfuerzan por seguirles los pasos. Y quiza con razón porque la historia del Íbis ha dado hasta para pensar en películas y han sido inspiración en algunos programas de televisión, su fama ha traspasado las fronteras del Brasil. Pero más allá de la fama y el éxito (que realmente nunca les interesó) lo que cuenta para ellos es seguir fieles a su eslogan "lo importante no es competir... si no existir".
Comentario final: Su mascota... tendrá algo que ver con su óptimo desempeño?
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